FUEGO EN LA LENGUA
Pr Sergio Fratti/ Vida Internacional
INTRODUCCION
Hoy voy a hablar de nuestro problema de controlar la lengua.
Santiago 3:2 Todos cometemos muchas faltas. ¿Quién, entonces, es una persona madura? Sólo quien es capaz de dominar su lengua y de dominarse a sí mismo. (TLA)
Santiago 3:5-6 Y lo mismo pasa con nuestra lengua. Es una de las partes más pequeñas de nuestro cuerpo, pero es capaz de hacer grandes cosas. ¡Es una llama pequeña que puede incendiar todo un bosque! (6) Las palabras que decimos con nuestra lengua son como el fuego. Nuestra lengua tiene mucho poder para hacer el mal. Puede echar a perder toda nuestra vida, y hacer que nos quememos en el infierno. (BLS)
La Siquiatra Louann Brizendine escribió un libro llamado “El Cerebro Femenino” y entre otras cosas, ella dice que un estudio moderno demuestra que las mujeres en promedio hablan 3 veces más que los hombres, o más específicamente, pronuncian unas 20,000 palabras al día, versus las 7,000 del hombre promedio.
Según la psiquiatra autora del libro, esto se debe a que la parte del cerebro que procesa el habla en las mujeres es el más grande que la del hombre. Sin embargo, debido a esta misma razón, la autora dice que los hombres comunican menos sus emociones que las mujeres.
Pensando en esto se me vino a la mente un versículo de proverbios
Proverbios 10:19 El que mucho habla, mucho yerra; el que es sabio refrena su lengua.
La Biblia dice entonces que por el simple hecho de hablar nos lleva a cometer muchos errores.
Uno de los errores más comunes que cometemos cuando hablamos es el de murmurar. (Chismear)
A lo largo de la historia hemos notado lo destructiva que es la murmuración, y en la iglesia podemos ver que es un arma usada por nuestro enemigo para entretener al pueblo de Dios para no cumplir su propósito.
1Corintios 10:10 Ni murmuréis, como algunos de ellos murmuraron y perecieron por el destructor.
Note esto que interesante, el pasaje de 1 Cor. 10 nos describe 5 pecados que cometió el pueblo de Israel y por los cuales no entro a la tierra de Canaan, y entre estos pecados graves estaba La Murmuración.
Y note lo que dice al final:
1Corintios 10:6 Estas cosas sucedieron como ejemplos para nosotros…
Para que aprendamos a NO hacer eso…
No están escritas ahí para que digamos “que malos los israelitas” no es para que juzguemos, es para que aprendamos.
¿Qué es Murmurar?
“Murmurar”: “Conversación en perjuicio de alguien que no está presente y en la que se censuran sus acciones”
“Murmurar”:
En el griego se usan las siguientes palabras:
“Psithurismos”: “Encantamiento dicho entre dientes”.
“Gongustes”: “Uno que se queja contra Dios”
“Psithuristes”: “Uno que actúa clandestinamente”
Note que habla no solo de hablar si no de actitudes que muestran malas intenciones de dañar a otros.
Y uno de los sinónimos de Murmurar es: Chismear.
¿Qué es el Chisme?
Es divulgar una información cuando uno no es parte del problema ni de la solución.
Y le repito que el Chisme o la Murmuración a veces nos parecen inofensiva pero es algo muy malo.
- LA MURMURACION DE MARIA
Hay una ejemplo muy conocido en la Biblia a cerca de eso, que nos puede enseñar la dimensión del daño que eso causa y como remediarlo.
Números 12:1-2 María y Aarón hablaron contra Moisés a causa de la mujer cusita que había tomado, porque él había tomado por mujer a una cusita. (2) Ellos dijeron: —¿Acaso sólo por medio de Moisés ha hablado Jehovah? ¿No ha hablado también por medio de nosotros? Y lo oyó Jehová.
María era hermana de Moisés, y veo en ella actitudes que se parecen a las nuestras.
De ella solo le habla en cuatro ocasiones en la Biblia, en dos de ellas está haciendo cosas buenas y en una está murmurando…
- Cuando está en el rio Nilo y esta cuidando a su hermanito Moisés de tres meses.
- Cuando esta Junto al Mar Rojo y acaba de cruzarlo en seco junto con el pueblo de Israel y dirige la alabanza y la danza junto a otras mujeres.
- Cuando va en el desierto y se pone a murmurar contra su hermano.
- Cuando muere también está en el desierto.
Note algo importante: Cada vez que ella está cerca del agua está haciendo algo bueno, pero cuando está lejos del agua, en el desierto está murmurando.
La Biblia usa el agua para referirse a la Palabra de Dios.
Efe 5:26 (Jesús a la Iglesia) para hacerla santa. Él la purificó, lavándola con agua mediante la palabra (NVI)
Cuando ud y yo nos alejamos de la Palabra (Leerla, oírla, congregarnos) rápidamente comienza a manifestarse el viejo hombre en nosotros.
“María”, su nombre significa “Amargura, Obstinación, Rebelión”
Por eso cuando perdemos el vínculo con lo santo, con la Palabra, se nos sale el indio, o la “India María”
Primera Murmuración
Números 12:1-2 María y Aarón hablaron contra Moisés a causa de la mujer cusita que había tomado, porque él había tomado por mujer a una cusita. (2) Ellos dijeron: —¿Acaso sólo por medio de Moisés ha hablado Jehovah? ¿No ha hablado también por medio de nosotros? Y lo oyó Jehová.
Esta murmuración fue contra la esposa de Moisés.
Ella y su hermano Aaron criticaron la vida privada de su líder, su hermano menor.
Una de las razones por las que ellos se atrevieron a criticar a Moisés, fue por el hecho de sentirse mayores que él.
Cuando no actúo con humildad, cuando me creo superior o mejor que los demás es cuando me siento con la autoridad de juzgar, criticar y murmurar de ellos.
Filipenses 2:3c “Con humildad y vean a los demás como mejores a ustedes mismos” (BLS)
Cuando dice «mejor» o «Superior» en el griego es la palabra “jupereco” que quiere decir «digno de respeto».
Y el concepto es que a alguien digno de respeto se le da el valor de uno mismo.
Este es un concepto radical.
¿Tratas a los demás como a ti mismo?
Eso es exactamente lo contrario de nuestra cultura.
Estamos llenos de personas que piensan que son mejores que todos los demás.
Hemos elevado el egoísmo a una forma de arte, o a una cualidad del carácter.
La Biblia dice que debemos disminuir la crítica, porque cuando es uno es crítico es porque estamos pensando que somos mejores que otras personas.
La humildad – (se lo he dicho antes) no es pensar menos DE Mí, sino pensar menos En Mi.
Ser humilde implica poner su atención no solo en usted sino en otras personas también.
La persona que piensa que es humilde, no lo es.
La persona humilde no lo sabe porque está centrado en los demás.
Santiago 4:11-12 “Si alguien habla mal de su hermano, o lo juzga, habla mal de la ley y la juzga. Y si juzgas la ley, ya no eres cumplidor de la ley, sino su juez. (12) No hay más que un solo legislador y juez, aquel que puede salvar y destruir. Tú, en cambio, ¿quién eres para juzgar a tu prójimo?”
Cada vez que juzgo, critico o murmuro de alguien más, estoy jugando a ser Dios.
Y esta pregunta me encanta: “¿Quién eres tú para juzgar al prójimo?”
Romanos 2:1 Por tanto, no tienes excusa tú, quien quiera que seas, cuando juzgas a los demás, pues al juzgar a otros te condenas a ti mismo… (NVI)
En algún punto entre el Carnaval y el Culto de la Iglesia se halla la persona que señala con su dedo a los demás.
Romanos 2:1 Por lo cual eres inexcusable, oh hombre, quienquiera que seas tú que juzgas; pues en lo que juzgas a otro, te condenas a ti mismo; porque tú que juzgas haces lo mismo. (RV60).
¿Quién es esta persona? Podría ser cualquiera («oh hombre, quien quiera que seas tú»)
- Es una persona que filtra la gracia de Dios por el colador de su propia opinión.
- Es la persona que cree que su llamado o ministerio es ser “El Semáforo de Dios”
- Es el hermano mayor del hijo pródigo que no quería asistir a la fiesta (Lucas 15.11–32).
- Es el obrero que trabajó diez horas, molesto porque el que trabajó una hora recibió la misma paga (Mateo 20.1–16).
- Es el hermano que anda en busca de faltas obsesionado por los pecados de su hermano y ciego a los suyos.
- Ese hermano o hermana que envía mensajes anónimos hablando mal de líderes de la iglesia sin tener el valor de decirnos de frente las cosas.
Mateo 7:1-5 No juzguéis, para que no seáis juzgados. (2) Porque con el juicio con que juzgáis, seréis juzgados, y con la medida con que medís, os será medido. (3) ¿Y por qué miras la paja que está en el ojo de tu hermano, y no echas de ver la viga que está en tu propio ojo? (4) ¿O cómo dirás a tu hermano: Déjame sacar la paja de tu ojo, y he aquí la viga en el ojo tuyo? (5) ¡Hipócrita! saca primero la viga de tu propio ojo, y entonces verás bien para sacar la paja del ojo de tu hermano.
Note lo que el Señor dijo, no que nos hagamos los locos con lo que pasa con otros, si no que si queremos fijarnos en la basurita del ojo ajeno, primero saquemos nuestra propia basura…
Una vez usted esté libre de pecado ¡tire piedras!
Pablo tiene un severo recordatorio para nosotros los juzgones metidos: No es atribución nuestra golpear la mesa con el mazo.
Una cosa es tener una opinión. Otra muy distinta es pronunciar un veredicto.
Una cosa es tener una convicción y otra es declarar culpable a la persona.
Una cosa es sentir asco por las acciones de criminales desalmados (y yo lo siento) y otra totalmente diferente es afirmar o creer que soy superior (y no lo soy) o que tal persona se halla más allá de la gracia de Dios (nadie lo está).
Nuestra tarea es detestar el pecado. Sin embargo, la tarea de Dios es lidiar con el pecador.
Dios nos ha llamado a aborrecer el mal, pero jamás nos ha llamado a que despreciemos al malo.
Pero, ¡ah!, cómo nos encanta hacerlo.
¿Hay acaso algo más sabroso que juzgar a otros?
Hay algo que nos llena de vanidad y nos da satisfacción: Ponernos la toga del juez, subir al estrado y descargar el mazo y gritar: «¡Culpable!»
Además… juzgar a otros es la manera rápida y fácil de sentirnos bien acerca de nosotros mismos.
Juzgar o condenar a otros es un estimulante del ego. (Y eso se siente rico)
Parándonos junto a los Mussolinis y Hitlers y “Chinos tres colas” del mundo, nos jactamos y le decimos a Dios «Mira Dios, comparado con ellos, no soy tan malo».
PERO HE AHÍ EL PROBLEMA…
Dios no nos compara con ellos. No son la norma. La medida es Dios.
Y comparados con Él, Pablo argumenta:
Romanos 3:12 «No hay quien haga lo bueno, no hay ni siquiera uno»
Y por eso es que el único capaz de juzgar es Dios.
Yo puedo ver a alguien que parece que está mal con Dios o que es malicioso, pero yo no sé sus motivos, sus antecedentes.
Cada vez que definimos a alguien como “malo, pícaro, perverso”, estoy jugando un mal juego, juego a ser Dios.
Cada vez que estoy juzgando a alguien más con una actitud crítica, estoy jugando a ser Dios.
El problema es que es divertido criticar.
Nos gusta criticar y ver las fallas de otras personas porque nos hace sentir superiores.
Pensamos que nos elevamos a nosotros mismos por poner a otros por el suelo.
La Biblia dice exactamente lo contrario.
¿Qué hago?
Cuando Ud. se encuentre con algún Juzgón, Chismoso, Murmurador ¡ayúdele!
Proverbios 25:23 El viento del norte ahuyenta la lluvia, y el rostro airado hace huir al chismoso.
Usted sabe que el que chismea está mal, pero tampoco debe escucharlos, porque el que escucha el chisme también peca.
Escuchar los chismes es como aceptar algo robado, (receptación) y te convierte también en culpable del delito.
Cuando alguien empiece a contarte un chisme, tenga valor y dígale: “No necesito saber eso. Hable eso mejor con esa persona”
Las personas que te cuentan chismes también hablan de ud a sus espaldas No se puede confiar en ella.
Si prestas atención a los chismes, Dios te culpa por el chisme también.
Pro 17:14 Soltar las aguas (hablar precipitadamente) es el principio de la contienda; pues, antes que se revuelva el pleito, déjalo.
Segunda Murmuración.
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Que, que feo se viste
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Que no corrige a sus hijos
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Que mucho se harta
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Que todavía chupa…
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Solo estupideces hablamos
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“Y LO OYO JEHOVA…”
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Puede que nadie te oiga, puede que esa persona de la que hablaste nunca lo sepa, PERO: “Dios lo oyó”
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Que Moisés era un hombre manso, y eso significa que él no iba a defenderse…
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Que si te andan en chismes, y no te defendés, Dios se mete y te defiende…
La segunda cosa que me enseña el V.4 es:
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CONSECUENCIAS
*El Trato para el Leproso…
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(V.44) “Llaga en la cabeza” – Lo primero que le examinaban era la cabeza- ¿Cómo está su relación con su cabeza?
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(V45) “Se cubre la boca, solo la destapa para gritar: ¡Impuro!”- No habla cosas buenas, solo malas.
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(V46) “Habitara solo”– Le caen mal los hnos.
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(V46) “Fuera del Campamento”- ¿Que había ahí? Los desechos del pueblo… Solo ven los desechos del pueblo, no pueden ver otra cosa
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¿CUÁL ES LA SOLUCION?
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Piense antes de hablar
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Pida ayuda a Dios diariamente
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Busque renovar su corazón
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